Comenzar el año marcándonos un guest post en toda regla, ¿cómo te suena?
Desde hace meses le seguimos la pista a la bloguera Hendayestyle, entre otras cosas, porque desde el principio nos dimos cuenta de que los valores que rigen los cimientos como marca de Olasa Taldea están muy alineados con los de Ana, y eso, querida lectora, siempre une.
Por esa razón y por muchas más, comenzamos hace unos meses una colaboración slow con la influencer afincada en Hendaye y la firma de cosmética Me and Me que distribuimos en exclusiva para Euskadi y Navarra, que ahora se materializa en esta nueva entrada al blog de Olasa en la pestaña La vida. Te dejamos con ella, pero antes, te invitamos a conocerla un poquito más en esta pequeña charla de tú a tú:
¿A qué te dedicas, Ana?
Llevo toda la vida trabajando como técnico en depuración de aguas, ¡nada que ver con el mundo que muestro en las redes! Sin embargo, todo el tema del cuidado de la salud de forma holística me apasiona. Curioso cómo partiendo de una mente racional y cuadriculada estoy fluyendo hacia el mundo de la intuición, las energías y la confianza. Todo un camino que me está encantando vivir.
¿Cómo empieza la aventura de Hendayestyle?
El origen de Hendayestyle nada tiene que ver con lo que es ahora. Lo que empezó siendo un blog de moda, fue transformando mi forma de vestir y, posteriormente, mi forma de vivir. Los años de consumo descontrolado de ropa me hicieron reflexionar sobre si era eso lo que realmente necesitaba. Cubrir carencias emocionales a golpe de tarjeta de crédito… ¡toda una lección de vida!
¿Cómo te definirías?
¿Ahora mismo? Me considero una persona feliz, calmada y en equilibrio. Buscadora incansable de belleza y de aprovechar cada uno de los instantes de mi vida. Pero no siempre fue así…
¿Qué pasó para que comenzases a explorar el movimiento slow en tu vida?
El estrés laboral… hace ya unos años conviví con la famosa ansiedad. Ahí empecé mi búsqueda. Tenía todo, pero algo fallaba. Estaba irascible, nerviosa y también insoportable (que le pregunten a mi familia). Desperté y poco a poco fui incorporando pequeños cambios que me han traído hasta aquí. El resultado es evidente.
Todo esto hace que tu manera de cuidarte, de entender el mundo de la belleza sea también desde un vértice consciente…
¡Sin duda! Uno de los valores que guían mi toma de decisiones es el respeto. Y respetar mi salud, el medio ambiente y a las personas implicadas en los procesos de fabricación de cada producto que adquiero, es importante para mí. De ahí que la belleza que busco, debe de ser lo más respetuosa posible.
Menciona tres sustantivos tangibles o intangibles que te den felicidad
Familia, silencio, naturaleza.
¿Cuál dirías que es tu Ikigai, tu razón de vivir?
Si te soy sincera, no lo tengo nada claro. Pero diría que va sobre ayudar a la gente a vivir de una forma más consciente, disfrutando de cada día y ayudándoles a sentir que sus días merecen la pena. Suena muy ambicioso, pero ¿por qué no?
¿Por qué Olasa Taldea?
Porque me veo reflejada. Porque nos mueven principios similares. Porque buscáis la belleza. Y el respeto. Y porque la intuición me dijo que quería estar cerca de vosotras.
Gracias, Ana.
Ahora sí, aprendemos más de bienestar y equilibrio gracias a nuestra invitada al blog de Olasa Taldea, la influencer Hendayestyle, ¡feliz lectura!
¡Hola! Soy Ana, de Hendayestyle, y en este pequeño espacio que me han cedido las compañeras de Olasa Taldea en su blog os quiero hablar acerca del vivir lento, o movimiento Slow. Una cuestión que yo veo más como un tema de intencionalidad y presencia que sobre lentitud.
Vivimos acelerados, sin destino, sin consciencia y sin valores claros… vivimos rápido, siguiendo los caminos que nos marcan y sin pararnos a pensar si es ese nuestro camino.
Sin embargo, ahora sé que existe otra forma de vivir, de estar presente en nuestros días y disfrutar de cada instante. Y que está al alcance de todos. Creo que es momento de parar y de volver a vivir de verdad.
Me gustaría hablarte de mi propia experiencia, de por qué y cómo empecé a vivir despacio. Sin duda ha sido una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida…
El porqué es muy sencillo. A pesar de tenerlo todo, me sentía totalmente desconectada de mi vida. Estaba ¿inquieta? ¿intranquila? ¿infeliz? En una búsqueda continua de una vida ideal que me habían vendido, pero para la que yo no estaba preparada.
Nunca me había parado a pensar (de verdad) si «eso que estaba viviendo» era lo que quería. Simplemente era lo que tocaba porque las cosas que todos hacen toman el calificativo de «cosas normales», y a ciertas edades, todos sabemos que salirse del redil suele estar penalizado. Y así fue como durante años estuve en un redil que no era el mío.
A veces hay algo que te ayuda a despertar, una maternidad, un cambio brusco en tu vida… o es simplemente un proceso en el que vas sintiendo que ese no es tu camino, que todo debería ser más fácil. Porque todo es más fácil.
Aquí es donde tienes que estar atenta, es el momento de empezar a cambiar. ¿Y cómo hacerlo?
Simplifica, menos cosas, menos actividades, menos personas… aprende a priorizar, a valorar tu tiempo, a buscar tus esenciales, esos válidos para ti, los que te hacen sentir que cada día de tu vida merece la pena. Puedes empezar reduciendo objetos a tu alrededor, es un ejercicio fantástico para colocar tu vida por fuera, y también por dentro.
Prioriza, es muy importante que tengas claros tus valores, tu esencia, tus prioridades, por lo que quieres vivir cada día. Cuando tienes claro qué es lo verdaderamente importante para ti, es más fácil saber a qué quieres dedicarle tu tiempo. La toma de decisiones se simplifica. En los próximos días, dedica una tarde a pensar sobre esto ¿qué es importante ahora mismo para ti? ¿familia? ¿trabajo? ¿tu salud? Dale una vuelta.
Planifica, que es otra forma de simplificar. Organizar tus jornadas en un sólo rato para reducir así el número de decisiones que tendrás que tomar después. Tu menú, tus jornadas deportivas, las limpiezas… es liberador.
Estate presente, y olvídate del resto. Presencia y disfrute de cada una de las cosas que has decidido hacer. Dedicándole el tiempo exacto que necesita cada cosa para seguir disfrutando después de todos los tiempos que has ganado. Te darás cuenta además, de que así, cada tarea a la que te dedicas, es mucho más placentera.
No importa dónde estés ni cuáles son tus circunstancias. Ve haciendo, poco a poco. Aplica estos pasos e irás notando como la vida, TU VIDA, va tomando la forma que tú quieres.
¡Feliz día!
2 respuestas
A mí me cambio la maternidad. Me he sentido muy identificada con tus palabras. Gracias
Gracias por comentar, Olatz. Se lo trasladaremos a Ana.